Los estadounidenses no creen en las noticias del aterrizaje de "Chang'e-4".

Como saben, el Año Nuevo estuvo marcado por el avance de China en el espacio exterior. El 2 de enero, la nave espacial china Chang'e-4 aterrizó con éxito en el reverso del satélite natural de la Tierra.

Sin embargo, hay escépticos en nuestro planeta que con gran duda reaccionaron ante el avance cósmico de los camaradas chinos. En particular, el deleite en el Reino Medio no atrajo a los analistas estadounidenses.

Como señala el experto de la publicación Bloomberg Adam Minter, todas las declaraciones de China sobre el hecho de que expulsará a Estados Unidos como la potencia espacial dominante en el futuro cercano es una audacia inaudita. Para el desarrollo de tal escenario es difícilmente posible. El espacio es un asunto muy caro. Y en un momento dado, el programa espacial de China se basará en la falta de financiación.

"Gracias al desarrollo de una industria espacial comercial estadounidense dinámica y de rápido crecimiento, es casi seguro que China estará al margen en las próximas décadas", señala el experto.

En su opinión, lo principal que Estados Unidos pudo hacer en los últimos tiempos fue comercializar el espacio. Esto elimina la carga sobre el presupuesto y permite la maniobra financiera para el desarrollo futuro de los programas espaciales de la NASA. Por lo tanto, la Agencia Espacial no gastó más del 10% del dinero de los contribuyentes en el desarrollo del programa SpaceX y el desarrollo del cohete Falcon-9. Todas las demás finanzas son de programas espaciales comerciales.

Como señala Minter, mientras los Estados Unidos continúen centrándose en el desarrollo de su industria espacial comercial y continúen financiando programas científicos avanzados, tienen pocas razones para temer un retraso. Además, los Estados Unidos tienen más oportunidades de atraer a científicos y otros especialistas talentosos que desean recibir ingresos correspondientes a su nivel, trabajando en una de las industrias más prometedoras del siglo XXI.

Por supuesto, los méritos de Estados Unidos en la conquista del espacio - más allá de la crítica. Recientemente, los estadounidenses lanzaron la sonda "New Horizons" realizó un estudio de un asteroide que voló aproximadamente 4 mil millones de millas de la Tierra. La sonda OSIRIS-REx entró en la órbita de otro cuerpo pequeño cósmico que volaba aproximadamente a la misma distancia de nuestro planeta. Además, la NASA realiza una misión permanente en Júpiter y cuatro en Marte, tiene una sonda solar Parker y dos naves Voyager abandonaron el Sistema Solar y transportaron información sobre la Tierra a un espacio distante. Todo es así.

Pero, por otro lado, los chinos no están solos en la conquista del espacio. Recientemente, el jefe de Roscosmos, Dmitry Rogozin, ya ha visitado el Imperio Celestial. En cuanto a los méritos de nuestro país en la exploración espacial, no son inferiores a los estadounidenses en algunos parámetros. Y, por cierto, en China, el jefe de Roscosmos expresó la intención del próximo trabajo conjunto sobre la exploración de la luna y la conquista de Marte.